16/4/13

Rezar

El único rezo que sé, es el de decir tu nombre quedito mientras miro por la ventana.
No negaré tres veces que tus ojos me iluminan mientras callo,
ese rincón obscuro que me atrapa y me desgasta.

Para besar tus labios, toda la fe se desborda.
Ya son rituales los que vivo al saludarte.

Y que tu nombre sea eternamente mi credo para salvar mi alma.